El Renacimiento fue un movimiento cultural en Europa desde el siglo XIV hasta el XVI, marcando la transición de la Edad Media a la Edad Moderna. Fue una transición gradual, ya que mantuvo características de la Edad Media mientras buscaba romper con la tradición y establecer nuevos paradigmas. Sin embargo, su impacto no se limitó a la cultura, sino que se extendió a la política, economía, religión y mentalidad social en Europa. El pensamiento renacentista se basó en la cultura greco-romana y buscó reemplazar los dogmas católicos con la ciencia.
Contexto del Renacimiento
En la Edad Media, la Iglesia Católica monopolizaba la cultura y la educación. Los sacerdotes enseñaban que Dios estaba en el centro de todo (Teocentrismo) y era la fuente de todo conocimiento. Aunque las escuelas y universidades religiosas enseñaban en latín, un idioma que ni siquiera los señores feudales conocían, la doctrina cristiana era seguida por todos, pues se suponía que era la base de la sociedad.
Para el siglo XIV, ciertos factores incentivarían un cambio:
- El feudalismo estaba colapsando, al igual que su economía agrícola. En las áreas urbanas, el comercio comenzó a prosperar, llevando a una acumulación significativa de riqueza por parte de los comerciantes. Estos comerciantes patrocinaban obras de arte, porque querían ganar prestigio social en tiempos en que generalmente se adquiría por derecho de nacimiento noble.
- En 1453, el Imperio Bizantino fue derrotado por los otomanos. Los eruditos griegos que vivían en su capital, Constantinopla, emigraron a Italia, llevando consigo textos importantes y otras fuentes de conocimiento. Esta afluencia de información inspiró un nuevo aprecio por la filosofía griega y romana.
- Los juristas burgueses querían legitimar la centralización del poder en manos de los reyes, por lo que recurrieron a los textos griegos y romanos, que enfatizaban el papel de los individuos, en lugar de Dios, como amos del mundo.
Estos factores culminaron en la emergencia de una ideología llamada Humanismo, porque colocaba a los humanos, en lugar de a Dios, en el centro del universo. No fue una ruptura completa con la Iglesia, porque los humanos eran considerados la creación más perfecta de Dios; valorar a los humanos significaba valorar al mismo Dios.
Comenzando en la Península Itálica, el arte renacentista adoptaría una ética humanista. Más tarde, se extendería por toda Europa, debido a la invención de la imprenta por Johannes Gutenberg, alrededor de 1440. Este dispositivo permitió la impresión de textos en mayor cantidad y velocidad. Ayudó a reducir el precio de los libros y terminó aumentando la cantidad de lectores entre los europeos.
Características del Renacimiento
Aunque el Renacimiento intentó ser un movimiento artístico universal, varió de un lugar a otro, según las tradiciones locales. En su conjunto, estas fueron las principales características de este estilo artístico:
- Humanismo o Antropocentrismo: la idea de que los humanos están en el centro del universo. En consecuencia, el arte renacentista ilustraría escenas comunes de la vida diaria humana y pondría énfasis en ilustrar fielmente los rasgos y características del cuerpo humano.
- Individualismo: los humanos querían mostrar sus propios talentos y cumplir sus ambiciones. Se creía que los derechos individuales estaban por encima de los sociales.
- Racionalismo y Cientificismo: el arte renacentista se basaba en la idea de que la ciencia era mejor que la religión para explicar el mundo. De hecho, algunos creían que la razón era el único medio para adquirir conocimiento.
- Clasicismo: el arte renacentista se inspiró en la cultura clásica de griegos y romanos, que destacaba la forma, la simplicidad, la proporción, la claridad de estructura, la perfección, la emoción contenida y el explícito llamado al intelecto. El nombre « Renacimiento » sería acuñado retrospectivamente en el siglo XVI, enfatizando el rejuvenecimiento de la cultura greco-romana.
Fases del Renacimiento
Usualmente, el Renacimiento se divide en tres períodos, que corresponden a tres siglos en el contexto de la historia cultural italiana:
- El Trecento (siglo XIV, 1301-1400) fue una fase temprana del Renacimiento, cuando algunos artistas y escritores combinaban formas de expresión medievales con formas más recientes. En la literatura, el escritor más importante fue Dante Alighieri, autor de la Divina Comedia. En las artes visuales, el destacado fue el pintor Giotto di Bondone, quien comenzó a romper con las tradiciones medievales.
- El Quattrocento (siglo XV, 1401-1500) fue una fase plenamente desarrollada del Renacimiento, durante la cual ya había comenzado a extenderse por toda Europa. Los pintores comenzaron a crear pinturas al óleo y frescos — pintura en murales húmedos, de modo que las obras de arte se convirtieran en parte de las paredes mismas.
- El Cinquecento (siglo XVI, 1501-1600) fue un período en el que la Península Itálica enfrentó la intervención de potencias extranjeras, como Francia y España. Esto significó que el arte renacentista declinara allí, mientras florecía en otras regiones de Europa, donde el arte medieval aún no había sido superado.
Los más grandes artistas y científicos del Renacimiento italiano
- Dante Alighieri (1265-1321): fue un poeta italiano más famoso por ser el autor de la Divina Comedia, después de ser forzado a dejar Florencia. En claro contraste con el uso del latín por la Iglesia, escribió la Divina Comedia en latín. No obstante, su trama tenía conexiones con la religión — el personaje principal viajaba a través del Infierno, el Purgatorio y el Cielo.
- Giotto di Bondone (1267-1337): fue un pintor y arquitecto italiano. Rompió con la tradición medieval adoptando tendencias naturalistas en sus pinturas, como tratar de retratar cuerpos humanos con profundidad y movimiento.
- Sandro Botticelli (1446-1510): como pintor del período Gótico Tardío y del Renacimiento Temprano, mezcló estas dos tendencias. Sus pinturas son conocidas por sus formas gráciles, como se ve en El nacimiento de Venus y Primavera.
- Miguel Ángel (1475-1564): utilizando la técnica del fresco, pintó La Creación de Adán en el techo y El Juicio Final en el altar de la Capilla Sixtina, en la actual Ciudad del Vaticano. También fue escultor, y sus esculturas más famosas fueron la Piedad, representando a Jesús y María, y el David, representando a la figura bíblica que se opuso a Goliat.
- Leonardo da Vinci (1452-1519): inventó la técnica del sfumato para diluir los contornos humanos y hacer las pinturas más realistas. Sus pinturas más notables fueron la Mona Lisa, La Última Cena y el Hombre de Vitruvio. Empero, Da Vinci fue mucho más que un pintor: sus cuadernos contenían dibujos y notas sobre muchos temas, como anatomía, astronomía e ingeniería.
- Rafael Sanzio (1483-1520): se hizo ampliamente conocido por sus frescos, caracterizados por la armonía, el equilibrio, la claridad de forma y la facilidad de composición. Sus obras más importantes incluyen La Escuela de Atenas, La Madonna Sixtina y numerosas pinturas de la Madonna.
- Filippo Brunelleschi (1337-1446) y Donato Bramante (1444-1514): fueron arquitectos que introdujeron formas equilibradas, con proporciones armoniosas, en los edificios. Sus construcciones tenían columnas, arcos y bóvedas, muy parecidas a las romanas, griegas y latinas.
- Galileo Galilei (1564-1642): fue un físico y astrónomo que propuso métodos científicos para comprender la realidad. Esto lo puso en directa oposición contra la Iglesia, especialmente cuando validó la noción copernicana de que la Tierra gira alrededor del sol (Heliocentrismo), y no al revés. Debido a esto, fue puesto en arresto domiciliario.
El Renacimiento más allá de la Península Itálica
Durante el siglo XVI, el Cinquecento se caracterizó por la completa expansión del Renacimiento más allá de la Península Itálica. En varias partes de Europa, el estilo renacentista se introdujo junto al estilo gótico que prevaleció durante la Edad Media, dando lugar así a obras de arte peculiares.
En los Países Bajos, surgió el estilo de pintura flamenca. Se basaba en mejoras realizadas a las pinturas al óleo que permitían a los artistas beneficiarse de infinitas variaciones en color, iluminación y sombras. Comenzó en el sur flamenco, pero los pintores del norte también fueron importantes. Algunos artistas destacados fueron los hermanos Hubert Van Eyck, quien dejó muchas pinturas inacabadas cuando murió, y Jan Van Eyck, quien erróneamente fue considerado el inventor de la pintura al óleo. Otros pintores importantes fueron Jerónimo Bosch (1450-1516), quien adoptó un ethos místico, y Pieter Brueghel el Viejo (1525-1569), quien retrató la sencilla vida que llevaban los campesinos en esa época.
En España, El Greco (Domḗnikos Theotokópoulos) (1541-1614) fue un pintor, escultor y arquitecto griego que se considera precursor tanto del Expresionismo como del Cubismo, estilos artísticos que solo aparecerían en el siglo XX.
En el Sacro Imperio Romano Germánico, Albrecht Dürer (1471-1528) se especializó en grabados, en los que ilustraba tanto a personas como a él mismo y a paisajes.
Finalmente, el Renacimiento también dio origen a algunos de los escritores más renombrados hasta el día de hoy:
- Thomas More, autor de Utopía (1516).
- Luís Vaz de Camões, autor de Os Lusíadas (1572).
- William Shakespeare, autor de Romeo y Julieta (1597) y Hamlet (1601).
- Miguel de Cervantes, autor de Don Quijote (1605 y 1615).
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